Las cisternas son grandes contenedores que se utilizan para almacenar agua potable. Se puede almacenar agua potable, que proviene de un sistema público de agua, tratada o no tratada que puede venir de un sistema de captación (recolección) que recolecta agua de lluvia, agua subterránea, agua de manantial o agua superficial. Sin embargo, es muy importante limpiarlas para que el agua contenida no se contamine. A continuación, aprendé por qué la limpieza y desinfección de cisternas es crucial para conservar la salud y obtener mejores resultados.
¿Qué es una cisterna y para qué se usa?
Las cisternas son tanques de almacenamiento de agua que pueden estar en los techos, bajo tierra o en estructuras independientes al lado de las casas. Las cisternas están conectadas a sistemas públicos de agua o a sistemas de agua subterránea. Pueden ser de diferentes materiales y vienen en distintas capacidades.
Existen diferentes tipos de cisternas. Por ejemplo, las cisternas de agua subterránea se utilizan en sistemas de captación. Las cisternas independientes se pueden llenar con agua pública o sistemas de captación. Suelen encontrarse en cualquier tipo de construcciones y son excelentes complementos cuando se necesita disponer de agua extra sobre todo en zonas rurales o en o de el acceso al agua es limitado.
El agua de las cisternas se puede emplear en las tareas domésticas, en el riego o para la limpieza. Son muy utilizadas en zonas sensibles a desastres naturales como pueden ser inundaciones, fuertes lluvias o huracanes.
¿Por qué es importante limpiar y desinfectar una cisterna?
Mantener una higiene adecuada hacia el interior y exterior de una cisterna es fundamental para conservar la calidad en el agua. De esa manera se evitan enfermedades o cualquier tipo de afectaciones, ya que el agua puede ser habitat de microorganismos e insectos como mosquitos.
Si el agua está contaminada con combustible (gasolina o aceite) u otros productos químicos tóxicos, por ejemplo, no puede ser segura para su uso. El agua contaminada de esta manera deberá drenarse completamente de la cisterna. Y luego el recipiente deberá lavarse por completo.
Si tu cisterna usa agua tratada de un sistema público y no se vio afectada por un desastre natural, puedes usar el agua en tus actividades diarias. No obstante siempre se recomienda realizar una limpieza regular de la cisterna al menos, cada seis meses.
Si tu cisterna tiene conexiones abiertas (por ejemplo, canaletas y rebosaderos), puede llenarse con escombros de tormentas o con agua de inundación durante un desastre. Por eso, es importante estar atento a tus instalaciones y realizar los cambios y el mantenimiento que requieran.
Recuerda: desinfectar el agua en aquellas cisternas que se encuentran llenas de escombros de tormentas o inundaciones no es para nada efectivo. De hecho, es muy difícil determinar la cantidad exacta de cloro necesaria para una desinfección adecuada, y mezclarlo correctamente con el agua. Además, estas cisternas pueden volver a contaminarse con gérmenes en el medio ambiente debido a sus conexiones abiertas.
Limpieza y Desinfección de Cisternas
Si tu cisterna usa agua pública tratada, tu sistema de agua o las autoridades gubernamentales pueden indicarte que desinfectes la cisterna después de un desastre. También es posible que debas desinfectar tu cisterna si has estado afuera de tu hogar durante semanas o meses y crees que puede haberse contaminado.
Puedes desinfectar la cisterna siguiendo los siguientes pasos:
Si la cisterna está conectada a cualquier unidad de tratamiento de agua, cierra las válvulas de esas unidades.
- Agrega 3 tazas (un poco menos de 1 litro) de lavandina de uso al 5%–9% por cada 380 litros de agua en la cisterna de almacenamiento.
- Si la cisterna está conectada a la plomería interior, abre cada llave y deja correr el agua hasta que huela a cloro.
- Cierra todos los grifos y deja que la solución permanezca en la cisterna y las tuberías durante al menos 12 horas.
- Drena toda el agua de la cisterna.
- Después deberás llenar la cisterna con agua limpia y segura.
- Abre cada grifo y deja correr el agua hasta que no huela a cloro.
Si tu cisterna usa agua no tratada y tiene conexiones abiertas (por ejemplo, canaletas y rebosaderos), es posible que primero se deba drenar y limpiar la cisterna. Además, retira todos los escombros del área de captación, los desechos y el agua de la cisterna.
Si puedes hacerlo de manera segura, frota el interior de la cisterna con un cepillo duro y una solución de 1 taza (alrededor de 0,25 litros) de lavandina líquida sin perfume (hipoclorito de sodio al 5 %–9 %) mezclada con 10 alrededor de 38 litros de agua.
Enjuaga la cisterna con agua limpia; luego vuelve a llenarla con agua.
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¿Cada cuánto se necesita limpiar una cisterna?
Para eliminar sedimentos y diferentes contaminantes es aconsejable limpiar la cisterna al menos 1 vez al año, lo recomendable es hacerlo cada 6 meses. También es esencial que se realice una limpieza profunda cuando el agua se vea, huela o sepa diferente de lo habitual.
La cisterna debe limpiarse cuando los contaminantes, como roedores o agua de inundaciones terrestres, ingresan al recipiente, después de instalarla y cuando sea necesario eliminar los sedimentos de su fondo.
Es importante saber que también hay pruebas que pueden realizarse al agua para indicar si está contaminada o no.
Limpiar la cisterna anualmente. También cambiar los filtros antes de que se obstruyan, lo que suele llevar entre 6 y 8 meses y con mayor frecuencia si tiene filtros pequeños. Y adquirir productos y soluciones para el agua que sean de gran calidad, como las Cisternas Rotoplas que se distinguen por su excelente calidad, seguridad y bajo mantenimiento.