La minería y el uso del agua
En este artículo, te contamos sobre el uso del agua en la minería, la contaminación del agua y el impacto que puede tener la minería en el medioambiente.
Uno de los temas más importantes de la agenda actual es el cuidado de los recursos humanos, sobre todo del agua. Es importante saber cómo cuidarla, principalmente cuando tiene que ver con la sustentabilidad de las principales actividades económicas como la minería, pieza fundamental para el circuito productivo industrial. En este artículo te contamos la relación entre la minería y el agua, de qué manera la minería utiliza los recursos acuíferos de Argentina, cómo se produce la contaminación del agua por minería y de qué forma esta actividad puede ser diseñada y pensada para ser sostenible.
¿De qué forma la minería utiliza el agua?
La minería es la actividad primaria de extracción de minerales, tanto minerales energéticos producidos por la minería subterránea como el petróleo, como así también metales y minerales no metalíferos, que se usan en la industria y la construcción respectivamente. Es así que se destaca la importancia de la minería. Existen yacimientos mineros de cielo abierto y, como dijimos, subterráneos. Pero todos comparten una característica fundamental: utilizan mucha agua.
La utilización del agua en la minería sirve para la separación de los minerales de la roca. O bien se aplican químicos altamente tóxicos como el mercurio, el cianuro y el ácido sulfúrico para la lixiviación del terreno, o bien se utilizan otras técnicas que consumen agua en minería, que son la flotación o separación gravitacional del mineral y la roca. La refrigeración de herramientas y del propio yacimiento, la limpieza y lubricación de las perforaciones, el transporte de los minerales, y la restauración del área implicada en la mina, la revegetación, etc. son otras de las formas de utilización del agua para la minería. El agua en la minería se extrae del subsuelo, de ríos y otras corrientes de agua y del océano.
Hay quienes argumentan que la utilización del agua en minería es relativamente menor en comparación con otras actividades primarias como la ganadería y la agricultura, consumiendo el 1% del total del agua destinada en Argentina para actividades económicas diversas, primarias e industriales. Pero también hay quienes tienen una postura contrapuesta: sin importar el porcentaje del total de agua utilizada, de todas formas la explotación minera puede causar un gran impacto en los recursos hídricos, tanto por su utilización excesiva como por su contaminación.
Consumo sustentable
Tradicionalmente, la contaminación del agua por minería se produce a través de las descargas de desechos e infiltraciones de roca y de materiales tóxicos. Sin embargo, prescindir de la actividad minera no parece algo posible, dado que esta aporta materiales para diversas industrias y son un gran capital económico. Por lo tanto, y con el avance de la tecnología, la única solución parece, por el momento, promover un consumo sustentable del agua para la actividad minera moderna, dada la importancia de la minería y las consecuencias que la minería podría tener para el ambiente.
Un ejemplo de estas consecuencias tiene que ver con el agua y la minería a cielo abierto. Además de otros impactos ambientales en otros recursos, las consecuencias de la minería para el agua son principalmente dos. En primer lugar, la afectación por tóxicos de aguas de superficie, si los residuos no son adecuadamente almacenados y se filtran hacia los afluentes de agua para consumo. Esto no solamente afecta la cantidad de agua disponible para los seres humanos, sino que también acaba con la vida presente en ríos, arroyos, lagos y mares. Pero, en segundo lugar, la contaminación del agua por minería también puede darse en las napas subterráneas, dado que los desechos lavados por la lluvia se filtran y terminan en el subsuelo.
El agua es un recurso natural que se encuentra en peligro y que resulta vital para el futuro del planeta. Eso significa que para la minería es prioridad el estudio de la disponibilidad de agua para minería en la zona, para así desarrollar procedimientos de extracción que no afecte la calidad del agua. La minería en Argentina cuenta con una normativa, la Ley 24.585, que establece el cuidado del agua para la minería. Existen sanciones específicas para quienes utilizan más agua de la permitida, y hay un control de esta cantidad en todas las actividades económicas. Es por eso que desde la actividad minera se han diseñado técnicas que utilizan las empresas para la utilización del agua sustentable y sostenible.
Una de estas técnicas es el desarrollo de circuitos cerrados. El agua para minería no se extrae fresca para su utilización de manera constante, sino que es reutilizada dentro de un sistema cerrado, y se repone solamente en casos de evaporación o consumo humano. Esto ha ayudado mucho a que en nuestro país la contaminación de agua por minería sea la menor posible. De esta manera no hay una contaminación de agua de las capas subterráneas que son para consumo humano.
Además, el agua que proviene de las cloacas de los campamentos de minería se reutiliza para la minería, utilizándose para el riego de caminos y evitando la dispersión de polvo volátil.
Otra de las técnicas utilizadas en el uso del agua en minería es la separación y el desvío del agua que ya ha sido utilizada y contaminada para que no desemboque en el medio ambiente. También se utilizan protectores en las rocas para detener el escape de sustancias nocivas al agua, a través de sistemas que filtran los desechos.
Qué es la megaminería y cómo afecta al agua en Argentina
Es una forma de minería que se produce a gran escala, a través de la explotación minera llevada a cabo por empresas transnacionales. Dada la historia de la minería en Argentina, las empresas de mayor alcance han sido privadas y extranjeras. Dicha explotación ocupa territorios mucho más grandes que los de la minería tradicional. Es a partir de la existencia de la megaminería que los recursos descritos para la correcta utilización del agua no son suficientes para evitar la contaminación del agua por minería.
Ejemplos de esto en nuestro país son la minería en San Juan y la minería en Mendoza. La megaminería se produce a gran escala y eso conlleva una mayor exposición del ambiente a diferentes fallas que puedan presentarse en los sistemas de explotación minera. Por otro lado, estas provincias se caracterizan por su clima seco, en donde el agua es un bien escaso. Es por eso que ha habido numerosos intentos de prohibir la megaminería a partir del año 2004, a raíz de distintos accidentes que llevaron a la contaminación del agua por filtrado de toxinas.
