¿Cuáles son los tanques industriales más grandes?

Los tanques industriales son muy utilizados en distintas áreas de la producción. En el agro se almacena principalmente agua de riego, aunque también fertilizantes y granos. Otros rubros como el petroquímico y el alimenticio también requieren de un gran almacenamiento. Ahora bien, hay tanques de distintos tamaños, destinados a diferentes usos. En este artículo te explicamos cuáles son los tanques industriales de almacenamiento más grande, qué usos tienen y para qué sirven. 

¿Para qué sirven los tanques de almacenamiento industrial? 

Los tanques industriales son componentes clave en numerosos procesos industriales, ya que permiten almacenar, procesar y transportar materiales como líquidos, gases y sólidos. Estos recipientes están diseñados para cumplir con estrictas normativas de seguridad, evitar la contaminación y hacer más eficiente el manejo de grandes volúmenes de productos, permitiendo que las industrias funcionen mejor. Los tanques pueden fabricarse en distintos materiales, como acero inoxidable, fibra de vidrio o plásticos de alta resistencia, dependiendo de las características de las sustancias que se almacenan o procesan. En el caso de Rotoplas, nos especializamos en tanques de polietileno de alta densidad, lo que los hace resistentes a la corrosión.

En la agroindustria, los tanques industriales juegan un rol protagónico porque se ajustan a las particularidades del campo, que se centra en la producción y procesamiento de productos agrícolas y ganaderos a gran escala. Uno de los usos más comunes es el almacenamiento de agua para riego y otras operaciones agrícolas. En áreas donde el suministro de agua no llega o no es constante, los tanques permiten almacenar grandes volúmenes para garantizar que los cultivos reciban la cantidad adecuada en los momentos críticos de crecimiento. Al mismo tiempo, los tanques se utilizan para almacenar fertilizantes líquidos y pesticidas, facilitando su dosificación y aplicación precisa en el campo, lo que ayuda a optimizar los rendimientos de las cosechas.

Por otro lado, en el procesamiento agroindustrial, los tanques se utilizan para almacenar y procesar productos derivados de los cultivos, como aceites vegetales, jugos o leche. Estos tanques deben estar diseñados con tecnologías que aseguren la preservación de la calidad de los productos, evitando su descomposición o contaminación. En el caso de la producción de alimentos y bebidas, los tanques deben contar con sistemas de control de temperatura, recubrimientos especiales que prevengan la corrosión y mecanismos de limpieza que cumplan con los más altos estándares de higiene.

Hay casos en que los tanques industriales se utilizan para el manejo de residuos y subproductos, como los desechos orgánicos generados durante el procesamiento de alimentos. Estos tanques permiten el tratamiento y almacenamiento temporal de residuos antes de su disposición final o reutilización, como en el caso de la producción de biogás a partir de desechos orgánicos, lo que contribuye a una mayor sostenibilidad en las operaciones agroindustriales.

¿Cuántos litros tiene un tanque industrial?

Los tanques verticales para exteriores Rotoplas, fabricados en polietileno de alta densidad, ofrecen diversas capacidades de almacenamiento que van desde los 5000 hasta los 25000 litros.

Errores a evitar al utilizar tanques industriales

Como decíamos, el uso de tanques industriales es un gran aliado en muchos sectores productivos, desde la agroindustria hasta la petroquímica. No obstante, para garantizar su funcionamiento óptimo y seguro, necesitamos evitar errores comunes que pueden comprometer tanto la eficiencia del sistema como la seguridad de los trabajadores y del medio ambiente.

Uno de los errores más graves al utilizar tanques industriales es ignorar las especificaciones técnicas del tanque en relación con el material almacenado. Cada tanque está diseñado para contener ciertos tipos de sustancias, ya sean líquidos, sólidos o gases. Si el tanque no está fabricado con materiales compatibles con el contenido, puede sufrir corrosión, fisuras o fallos estructurales. Por ejemplo, almacenar ácidos en un tanque no resistente a la corrosión puede provocar la degradación del material y posibles fugas, generando riesgos tanto ambientales como para la seguridad de las personas. 

Otro error habitual es descuidar el mantenimiento regular y la inspección de los tanques. Los tanques industriales, especialmente los utilizados en la agroindustria para almacenar fertilizantes, agua o productos alimenticios, requieren inspecciones periódicas para asegurar que no presenten fisuras, filtraciones o problemas en sus sistemas de válvulas. Hay que tener esto en cuenta, porque de lo contrario pueden sobrevenir fallos estructurales o en la contaminación del producto almacenado. Además, el mantenimiento preventivo ayuda a prolongar la vida útil del tanque y a evitar reparaciones que a la larga resultan más costosas.

El sobrecargar los tanques es otro error común. Aunque los tanques industriales están diseñados para soportar grandes volúmenes de materiales, exceder su capacidad puede llevar a deformaciones, fallos estructurales e incluso explosiones en casos extremos. En contextos agroindustriales, donde los tanques se utilizan para almacenar líquidos como fertilizantes o productos químicos, una sobrecarga puede alterar la presión interna y dañar las paredes del tanque, comprometiendo su integridad.

Además, no seguir protocolos de seguridad al manipular sustancias peligrosas o tóxicas es un error que puede tener graves consecuencias. En muchas industrias, incluidas la agroindustria y la química, los tanques se utilizan para almacenar productos que requieren un manejo cuidadoso. No utilizar el equipo de protección adecuado, ignorar las medidas de seguridad durante la carga o descarga, o no seguir las normas establecidas para el almacenamiento de productos peligrosos puede derivar en accidentes graves, como incendios, explosiones o exposición a sustancias nocivas.

Por último, otro riesgo es fallar en la adecuada limpieza y desinfección de los tanques, especialmente en la agroindustria. Los tanques utilizados para almacenar productos alimenticios, como leche o granos, deben ser limpiados de manera regular y con los productos adecuados para evitar la contaminación cruzada o la proliferación de bacterias. 

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